Con mis hijos la he cagado en todo y todas las formas posibles.
Mi mal genio fue una característica bastante fuerte y constante, no solo con ellos, sino con mi entorno.
Tal como lo cuento en mi libro: «TÉMPERA MENTAL, de regreso a mi yo verdadero», ésto ha sido el detonante de mi debacle personal, y de mi reseteo mental.
Como seres humanos cometemos muchos errores; como padre o madre de familia, aún más, ―o al menos ése es mi caso―. La rabia cegó muchas veces mis comportamientos, mis acciones y mis reacciones.
Siempre fue mi personalidad la de querer dominar o imponer mis cosas, mis pensamientos, mis ideas, mis opiniones. Poco o nada me importaba la opinión de los demás ―aquí clasificaron mis hijos―, en lo que se refiere a la disciplina, los métodos, las formas. En la parte de su desarrollo personal, nunca quise influir en sus decisiones, pero sí, lo que ellos querían hacer, debía ejecutarse con mi metodología.
―¡Qué marica!―
La rabia, no es más que la peor forma posible de manifestar un sentimiento de frustración interno ―ésa no es la manera―, desafortunadamente lo entendí tarde pero, afortunadamente cuando lo hice estuve aún a tiempo de corregirlo, de enmendarlo.
No me enorgullezco de mis reacciones inadecuadas pasadas, tampoco me puedo someter a un escarnio personal permanente; afortunadamente cualquier momento de la vida se presta para comenzar nuevamente.
Ese comportamiento que manifesté por muchos años, lo único que logró fue una estigmatización del entorno hacia mí ―aún hoy, uno que otro me señala con mi yo del pasado―, principalmente la familia, ―jajajajaja―, ellos jamás van a cambiar ese concepto. Por más que hagas, que te esfuerces, que quieras mostrar, seguirás siendo el mismo malparido de siempre, pero este es un tema del que hablaré en otro artículo de mi Blog.
[…]
¿Cómo es tu temperamento la mayor parte del tiempo?
¿Qué tipo de reacciones tienes frente a algo que te incomoda o te desagrada?
¿Qué imagen tienen los demás de tí? Aunque con este interrogante en realidad deberías limpiarte el trasero; mejor pregúntate …
¿Qué imagen tienes de ti mismo/a?
¿Cuál es tu opinión acerca de la rabia, de la ira, del mal genio?
Pregunta lo que gustes, ―pienso que fui magister y especialista en el tema―.
Gracias, gracias, gracias.
¿Cuàl es tu opiniòn al respecto?
Te leo.
Te deseo un excelente y maravilloso dìa.
Dios te bendiga.
Namastè